Reseña: Un grito de amor desde el centro del mundo de Kyoichi Katayama

Hola a todos. De nuevo les traigo una reseña, porque si bien, acá hablaré de los libros que voy leyendo incluso si no me gustaron ¿ok? Así que, como lo prometido es deuda, aquí les va la nueva de nuevas y no tan nueva.

Well, well, well… haber, por donde empiezo, veamos. Primeramente estoy agradecida de no haber visto dorama, película, manga, o cosa alguna con relación a este libro porque ciertamente cosas así lo único que hacen es restarle objetividad a la hora de evaluar la obra literaria, porque ya se lleva la impresión de las anteriores. Así que como quien dice, esta obra estaba en su estado puro cuando llegó a mis manos.

Ahora pasemos a la reseña.

Un grito de amor desde el centro del mundo

Autor: Kyoichi Katayama

Año de Publicación: 2001 (Japón)

Precio: $136 mx.

Paginas: 192

Editorial: Alfaguara

Sinopsis: Sakutarô y Aki se conocen en la escuela de una ciudad provincial de Japón. Él es un adolescente ingenioso y sarcástico. Ella es inteligente, hermosa y popular. Pronto se convierten en amigos inseparables, hasta que un día, Sakutarô ve a Aki con otros ojos, y la amistad cómplice se transforma en una pasión arrebatadora. Ambos viven una historia capaz de trastocar los sentidos y borrar las fronteras entre la vida y la muerte.

Calificación:

Mi Opinión:

Como el nombre acertadamente lo dice, el libro es un grito desgarrado de un joven que ha perdido a su primer amor juvenil por culpa de una enfermedad. Así empieza el libro; Sakutarô (Saku para los amigos) despierta llorando de un sueño con la ya muerta Aki. Y aunque la premisa de "la conmovedora historia de amor que ha enamorado a millones de lectores de todo el mundo" pareciera que va a vender (ya saben cómo son las estrategias de la mercadotecnia y la publicidad ¬_¬), el libro no ha hecho más que dejarme un poquitín decepcionada. Las 192 páginas se pasan intercalándose tres cosas: la tristeza deprimente de Saku, sus recuerdos ~flash backs~ con Aki, y unas reflexiones bien a lo zen sobre la vida, la muerte y el amor.

No es que yo sea una insensible, que va (una amiga incluso dice que lloro hasta cuando se muere un perro XD), sino que sencillamente los personajes no son tan entrañables, o es que la historia está ya bastante trillada entre los orientales que a veces se hace el tedio entre lectura y lectura, porque ya se sabe en qué va a acabar. Y sea dicha la verdad, a los orientales en general (no sólo a los japos) les encanta matar a uno de sus portas y dejar al otro medio muerto en vida, mientras este último acaba frente al mar o algo así (véase cielo de amor, escalera al cielo, otoño en mi corazón, etc). Pero en esta novela quizá es por lo muy cotidiano del asunto lo que tal vez hace que no cause gran impresión, ya que muchos estamos (hablando específicamente por mí) acostumbrados a grandes historias de amor, y un amor tan efímero como el de Saku y Aki no me logró llegar a tocar la fibra sensible.

Pero, como digo también, cada cabeza es un mundo y a mi quizá no me llegó al 100, muy probablemente porque no comparto creencias como la reencarnación y otras cuantas cosas sobre ideales budistas, pero otros sí podrían identificarse. He de admitir que de vez en cuando las conversaciones simplonas entre Saku y Aki me sacaban una sonrisa, y que sí me puso a pensar qué sentiría yo si la persona que más quiero se fuera de mi lado.

Lo bueno de Katayama es la forma tan vívida de retratar el primer amor lleno de incertidumbre por el futuro pero a la vez sincero al grado de la pureza. Para algunos será bueno enterarse que es una lectura corta, y a pesar de que a veces se pone medio depresiva la narración, es rápida de leer. Aparte, se me hizo barato, la portada me parece linda y pues, para agregar, si te gustan las historias sencillas con profundas reflexiones de vida, te gustaría recordar como tu corazón tembló con tu primer amor, o pasar una tarde entretenida esta novela es para ti. Sino, mejor ni la compres.

Nos LEEmos en la próxima ^_^